jueves, 25 de julio de 2019

¿Crees todo lo que dice la ETIQUETA?

La etiqueta de un alimento envasado es un elemento clave que nos proporciona información relevante sobre el producto que estamos adquiriendo (¿Cómo leer una etiqueta en 9 pasos?). No siempre nos interesamos en leerla, pero quienes ya tenemos el gusto y el hábito de hacerlo, no podemos dejar pasar ni la información nutrimental ni el listado de ingredientes. 

En esta ocasión, quisiera que nos enfocáramos en la veracidad de las etiquetas, específicamente en los cálculos de nutrimentos. Es muy frecuente encontrar errores de este tipo y no se necesita ser un gran conocedor para descubrilos, 

Analizaremos los errores contenidos en 2 etiquetas. Cabe destacar que no pretendo hacer una mala publicidad a los productos presentados, sino generar una cultura de consumidores informados. Algunas veces, los productores se percatan del error, pero cuando no es así, es nuestro deber como consumidores señalarlo.


Caso 1. Suplemento Alimenticio

Este suplemento contiene colágeno, una proteína muy famosa por ser la responsable de la firmeza de la piel. ¿Qué es lo que sucede con esta etiqueta? Quizá sea algo insignificante, pero tiene un error en el apartado de información adicional. 

Atención: Al parecer, confundieron los mg con g, así que las cantidades sobre colágeno, ácido hialurónico, vitaminas, té verde y semilla de uva son completamente erróneas. Este es uno de los errores más frecuentes que he encontrado en etiquetas.


Caso 2. Obleas de Amaranto 

Muy ricas por cierto. Además de su sabor, sabemos que son bajas en calorías y es precisamente en el contenido energético en donde detectamos el error.

Atención: se menciona que el contenido de carbohidratos es aproximadamente de 25 g y que no contiene azúcar, por lo tanto, podemos asumir que este valor corresponde al almidón. Así pues, para calcular el valor energético proveniente de este nutrimento, tendríamos que multiplicar:

25 g de almidón * 4 kcal/g = 100 kcal 

Obviamente, sólo estamos calculando el contenido energético de carbohidratos y nos faltaría el de proteínas y grasas. Sin embargo, el contenido del empaque menciona que sólo aporta 59 kcal, cuando en realidad tendría un aporte aproximado de 115 kcal.



 




martes, 24 de julio de 2018

Realidades sobre el gluten (parte I)


Hace poco, una buena amiga me estaba comentado la forma en la que había logrado elaborar una galleta sin hacer uso de huevo. Me llamó la atención cuando dijo que, gracias al gluten de uno de sus ingredientes, había obtenido una buena consistencia en la masa. Curiosamente, el ingrediente que mencionó no contenía gluten, por lo que le prometí que escribiría una reseña al respecto.

Primero lo primero, ¿qué es el gluten?

Algunos cereales
Es un nutrimento, específicamente una proteína que se encuentra de manera NATURAL en los cereales: maíz, trigo, avena, centeno, arroz, entre otros. Consta de dos partes o fracciones, una llamada prolamina y otra llamada glutenina. Así pues, prolamina + glutenina conforman el llamado gluten. Su concentración varía considerablemente en los cereales, siendo el trigo el que lo presenta en mayor cantidad. Debido a esto, es frecuente que se le relacione con el pan.
  

¿El gluten sirve para algo?

Propiedades elásticas que imparte el gluten a las masas
Por supuesto. ¿Has visto cómo la masa para pizza se extiende sin romperse?, o ¿hemos observado cómo un pan se “esponja” en el horno sin deformarse? Esto es posible gracias al gluten, el cual permanece en la harina de un cereal después de la molienda. Cuando éste entra en contacto con el agua y posteriormente es amasado, produce una masa muy elástica que facilita un sinfín de preparaciones, especialmente las que incorporan harina de trigo.

En este punto es importante considerar que, hay ingredientes que imparten propiedades semejantes al gluten pero no por ello lo contienen. Tal es el caso del huevo, las gomas (guar, xantana), los geles de linaza o chía, los cuales se utilizan al elaborar las famosas pero a la vez complejas preparaciones gluten-free.

¿Si el gluten es un nutrimento, por qué muchas personas lo han retirado de su dieta?

Algunas respuestas:

  • Porque está de moda. Quizá esta sea la razón más poderosa. El mercado está lleno de productos sin gluten que, generalmente se venden como “más saludables” aunque esto no sea sea necesariamente cierto.
  • Porque “engorda”. Como lo hemos platicado en “Los alimentos no engordan”, esta es una razón poco convincente. Aportarían más calorías el almidón y las grasas de un producto de panadería, por mencionar un ejemplo, que el gluten contenido en éste.
  •  Porque se sienten mal al consumirlo. Esta sí que es una buena justificación. Puede haber personas sensibles, alérgicas o intolerantes al gluten. Por ejemplo, existe un padecimiento genético conocido como enfermedad celíaca. Las personas que lo padecen no pueden consumir gluten (específicamente la fracción de prolamina), ya que inflama sus vellosidades intestinales evitando que los nutrientes sean absorbidos por el cuerpo. Lo anterior causa diversos síntomas entre los que se pueden mencionar malnutrición, diarrea y pérdida de peso excesivas.

Reflexión

Si tú eres de las personas que han retirado el gluten de su dieta, quizá sea necesario reflexionar los motivos. Recordemos que la alimentación debe ser variada y si en realidad no tienes un buen pretexto para retirarlo, no se recomienda hacerlo. Si aun así, estás convencido de no consumirlo, te reto al leer la siguiente publicación “El Gluten Escondido en los Alimentos”, en donde te demostraré que aunque intentes retirarlo, seguramente lo consumes sin darte cuenta.  

Referencias

Badui, S. (2015). La ciencia de los alimentos en la práctica. 2ª edición. México: Pearson

Organización Mundial de Gastroenterología. (2012). Enfermedad celíaca (Guías Mundiales). Recuperado de http://www.worldgastroenterology.org/UserFiles/file/guidelines/celiac-disease-spanish-2013.pdf

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martes, 8 de agosto de 2017

¿Cuál aceite o grasa es mejor?

Los malos hábitos de alimentación en nuestros días nos han llevado a juzgar los alimentos como “buenos” o “malos”; tal es el caso de las grasas y los aceites. Sin embargo, me gustaría comenzar esta publicación recordando que la grasa es un nutrimento indispensable para el organismo. Si no me creen, quizá sea conveniente que investiguen, ¿qué pasaría si el cerebro, nuestra piel y cada una de las células que nos componen, no tuvieran grasa?

Aceite de Oliva Extra Virgen Marca Carbonell
Así es, la grasa es un nutrimento indispensable porque cumple funciones muy específicas en nuestro cuerpo. Sin embargo es conveniente saber que las grasas y aceites de los alimentos, están constituidos por distintos componentes: ácidos grasos saturados, ácidos grasos insaturados (omegas), ácidos grasos trans (término que se refiere al acomodo de la molécula y no, a que la grasa es transgénica), colesterol, entre otros.

Las personas normalmente se refieren a “grasa buena” cuando ésta contiene ácidos grasos insaturados como el ácido oleico (omega 9) presente en el aguacate, o el ácido DHA (omega 3) presente en pescados y algas marinas. Por otra parte, el término “grasa mala” se refiere a los ácidos grasos saturados como el ácido palmítico presente en el aceite de palma, o el ácido butírico presente en los productos lácteos. Asimismo, las “grasas malas” incluyen a los ácidos grasos trans que pueden encontrarse en productos que hayan sido hidrogenados (proceso mediante el cual un aceite líquido se pone en contacto con gas hidrógeno para la obtención de una grasa sólida); tal es el caso de las mantecas vegetales y las margarinas.

Ahora bien, estas grasas “buenas” y “malas” (insaturadas, saturadas) son muy necesarias para el organismo, con excepción de las trans. Por supuesto, en proporciones adecuadas. Se sabe que un alto consumo de grasa saturada puede elevar los niveles de colesterol sanguíneo, mientras que un consumo adecuado de grasas insaturadas puede tener el efecto contrario. No obstante, hay que considerar que la grasa proporciona el valor más alto de energía en comparación con otros nutrimentos (ver "Los alimentos no engonrdan, sólo aportan energía"); de ahí la importancia de su moderación. Entonces, la pregunta sigue siendo, ¿cuál aceite o grasa es la mejor? En la reflexión encontrarán algunas recomendaciones útiles, pero antes, como ya es una costumbre en este blog hablaremos de algunas creencias con respecto a las grasas y aceites:

Etiqueta de Aceite Marca Canoil
1. Se cree que la grasa animal es rica en grasa saturada y la vegetal en insaturada.

Realidad: generalmente sí, pero siempre hay excepciones a la regla. Observemos la siguiente imagen que encontramos en la etiqueta del aceite Canoil, la cual nos muestra un comparativo del perfil de ácidos grasos (saturados, insaturados y omegas) de distintas grasas y aceites.

De inicio, nos podemos percatar de que cualquier grasa o aceite contiene tanto grasa satura como insaturada. Sorprende que el tan famoso aceite de coco es el más rico en ácidos grasos saturados (ácido laurico). De ahí le sigue el aceite de palma y posteriormente la manteca de cerdo. Por otra parte, la carne de puerco es rica en ácido oleico, la misma grasa que encontramos en el aceite de oliva, y esto se debe en gran medida a la alimentación.




Aceite de coco
2. Se cree que la mejor grasa para cocinar es el aceite de coco porque trae muchos beneficios a la salud.

Realidad: el aceite de coco es muy rico en grasa saturada y esto lo hace una excelente opción para soportar las altas temperaturas del freído. Hay algunos estudios que señalan que el ácido láurico del coco (grasa saturada) no eleva los niveles de colesterol en la sangre. Lo anterior se comprobó con roedores de laboratorio. Sin embargo, esta propiedad no se debe al ácido láurico, sino a los antioxidantes presentes en el aceite (vitamina E). Pero, ¡oh sorpresa! Los antioxidantes se pierden conforme el aceite o la grasa se calienta. Además, los roedores en este estudio fueron alimentados con aceite de coco extra virgen, sin calentar, por lo que no podemos suponer el mismo efecto si calentamos el aceite.

Manteca Inca
Imagen propiedad de INCA (R)


3. Se cree que las grasas trans sólo se pueden producir en un reactor químico.

Realidad: en el intestino de animales también se producen bajas concentraciones de grasas trans.






Reflexión

Aceite de Oliva Marca Carbonell
(Presentación para guisar y freír)
1. Las grasas y los aceites dan un sabor exquisito a los alimentos pero es una realidad que debemos moderarlos en nuestra alimentación.

2. La mejor forma de consumir una grasa o un aceite dependerá del uso que quiera dársele:


Para ensaladas: se recomienda aceite extra virgen. Yo recomendaría un aceite de oliva extra virgen en vez de uno de coco.
Para freír o guisar: se recomienda un aceite resistente a la temperatura. En este caso puede ser uno de coco (aunque deben considerar que su alimento sabrá a coco), manteca o presentaciones especiales para guisar o freír. 

3. Las nueces, pistaches y cacahuates son una buena fuente de grasa insaturada. Aún así, se recomiendan no más de 6 piezas al día.

4. Un alimento frito, por muy rico que sepa, jamás será un alimento balanceado. Este tipo de alimentos (papas fritas, salchipulpos, churros, quesadillas, tacos dorados, etc.) se deben evitar en la mayor parte del tiempo.

5. Los pescados como el salmón y el atún ya tienen un muy buen contenido de grasa, así que no requieren tanto aceite ni mantequilla para cocinarse.

Tabla Nutrimental de Aceite Marca Conoil
6. Al día, deberíamos utilizar un equivalente a dos cucharadas de aceite o manteca para guisar los alimentos, no más.

7. Una ensalada se convierte en una fuente de abundante grasa en la medida que agregamos aderezo. Recuerda, no más de dos cucharadas, y si puedes, prefiere vinagretas en vez de aderezos.

8. Los puestos de comida y restaurantes, por lo general, abusan de la grasa y el aceite para cocinar los distintos platillos, así que mejor procura comer en casa y si esto no es posible, intenta pedir tus platillos al vapor o a la plancha.




Referencias

Nevin, K. G., & Rajamohan, T. (2009). Wet and dry extraction of coconut oil: impact on lipid metabolic and antioxidant status in cholesterol coadministered rats. Canadian Journal Of Physiology And Pharmacology87(8), 610-616. doi:10.1139/y09-045

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Imagen obtenida de: http://inca.mx/presentaciones/



jueves, 27 de octubre de 2016

Azúcar, stevia o sucralosa. ¿Cuál es mejor?

Azúcar o sacarosa
Cualquier sustancia que proporciona dulzor es llamada edulcorante. Algunos aportan energía al organismo y otros no, algunos se encuentran en la naturaleza y otros se obtienen a través de un proceso químico. En el mercado existe una gran variedad de edulcorantes comercializados por distintas marcas: Svetia, Splenda, Canderel, Sweet’N Low, entre otros. Sin embargo, si revisamos el listado de ingredientes seguramente encontraremos algunos de estos componentes: stevia, sucralosa, aspartame, sacarina, e incluso azúcar.



Existen muchos mitos alrededor del consumo de edulcorantes por lo que en esta ocasión, proporcionaremos datos de interés sobre tres edulcorantes que seguramente encontraremos en cualquier mesa de cafetería o restaurante: azúcar convencional (sacarosa), stevia y sucralosa:

Azúcar

Es un edulcorante natural que aporta energía al organismo (4 kcal/g) y se obtiene del jugo de la caña de azúcar. 

Mito: “El azúcar engorda”

Realidades: 
  • Al consumir el contenido de un sobre de 7 g de azúcar, este nos aportaría 45 kcal, lo cual no sería suficiente para rebasar una ingesta calórica promedio (1800 kcal).
  • El azúcar está presente en diversos alimentos y bebidas: frutas y jugos, refrescos, golosinas, panes y pasteles, algunos vegetales como zanahoria y betabel, entre otros.
  • Por tanto, una ingesta elevada de alimentos ricos en azúcar puede favorecer la aparición de caries dentales, niveles altos de glucosa sanguínea y predisposición a padecer obesidad.
  • Según la Organización Mundial de la Salud OMS (WHO, 2015):
  1. En adultos se ha observado un aumento de peso en la medida que aumenta la ingesta de azúcar o alimentos ricos en éste componente.
  2. En niños se ha observado que los que consumen mayor cantidad de alimentos y bebidas azucaradas son más propensos a padecer sobrepeso.
  3. El consumo de azúcares libres debe ser menor al 10% de la ingesta calórica total. Es decir, si una persona requiere 1800 kcal, 180 kcal pueden corresponder a azúcares como máximo. Lo anterior equivale a 45 g de azúcar. 
  4. Algunos ejemplos de combinaciones de alimentos que corresponden a 45 g de azúcar libre al día son:
                                   - 2 sobres de azúcar + 1 manzana + 1 taza de melón + media dona
                                   - 120 ml de jugo de naranja natural + 3 galletas con chispas de chocolate

Stevia

Stevia rebaudiana
Es una planta originaria de Paraguay; sus hojas han sido utilizadas por los guaraníes desde hace muchos años por su capacidad edulcorante (Brandle, 1998). Las hojas contienen sustancias naturales 150 – 300 veces más dulces que la sacarosa (azúcar) y no aportan kilocalorías al organismo. Dos de los componentes principales son el esteviósido (que al parecer se transforma en una sustancia llamada esteviol) y el rebaudiósido A, siendo este último el más dulce. La stevia puede consumirse fresca, aunque por lo general se comercializa como hoja seca. También se comercializa el extracto líquido, el cual contiene una alta concentración de los compuestos responsable del dulzor (Jiménez, 2010); es por esto que con una mínima cantidad de extracto se logra un dulzor adecuado.

Mito: “Es seguro consumirla por ser natural”

Realidades:

  • El que una sustancia sea natural, no implica que no sea peligrosa. Es bien sabido que los venenos más letales del mundo se encuentran en la propia naturaleza.
  • Después de analizar diversos estudios, el Comité de Expertos en Aditivos Alimentarios (JECFA) de la OMS señala lo siguiente:
  • Se ha reportado que las hojas secas (5 g) y los extractos de stevia provocan una severa reducción en la fertilidad en ratas hembras (JECFA, 1999).
  • Al parecer, el esteviósido puro es un componente seguro pero el esteviol tiene cierto potencial carcinogénico. 
  • La Ingesta Diaria Admisible (IDA) es de 0-4 mg de esteviol por cada kilogramo de peso corporal (JECFA, 2008).
  • Por ejemplo, una persona de 70 kg podría consumir como máximo 280 mg de esteviol, aproximadamente 70 sobres de Stevia marca Canderel.

Sucralosa

Sobres de splenda (sucralosa al 1.2%)

Es un edulcorante artificial que se obtiene modificando la molécula de azúcar (sacarosa). El proceso se lleva a cabo sustituyendo algunos átomos de oxigeno e hidrógeno del azúcar por átomos de cloro. Lo anterior resulta en una molécula 600 veces más dulce que el azúcar, que no aporta kilocalorías (Navarro, 2000).

Mito: “La sucralosa es cancerígena”


Realidades:

  • El JECFA ha establecido una IDA 0-15 mg/kg de peso corporal (JECFA, 2005). Lo anterior indica que puede consumirse en mayor cantidad que la stevia.
  • Una persona de 70 kg puede consumir máximo 1050 mg de sucralosa al día, equivalente a 87 sobres de 1 g de la marca Splenda.
  • La sucralosa se excreta principalmente por orina (Navarro, 2000), al igual que todos aquellos edulcorantes que el cuerpo no logra procesar. Es por esto que se ha relacionado el consumo de edulcorantes artificiales con la aparición de tumores en vías urinarias (Mishra, 2015).

Reflexión

El organismo humano está diseñado para procesar el azúcar; este es transformado en energía que el cuerpo utiliza para mantenerse vivo. Su consumo con moderación (10% de las kcal diarias como máximo) no trae desventaja alguna al organismo. Es por esto que quizá debamos preguntarnos, ¿por qué requerimos utilizar edulcorantes artificiales?, ¿es tanta la necesidad que tenemos de experimentar dulzor en todo lo que comemos y bebemos? Como consumidores somos un tanto incoherentes ya que nosotros mismos generamos la demanda de todas estas sustancias y después nos preocupamos por su grado de toxicidad.

Pensemos en lo siguiente: el JECFA recomienda ingestas diarias admisibles para stevia y sucralosa desde los 0 mg, es decir, nada de edulcorante artificial al día. Sabemos que es prácticamente imposible alcanzar la ingesta diaria máxima, sin embargo, debemos recordar que no sólo consumimos edulcorantes con muy bajo grado de toxicidad, sino una gran diversidad de aditivos químicos aparentemente “poco tóxicos”. Y hasta el momento, no se ha estudiado la posible sinergia de todos estos componentes en nuestro organismo.

En conclusión, mi recomendación es consumir azúcar y alimentos ricos en azúcar según lo establecido por la OMS y sólo emplear la stevia o la sucralosa una vez que hayamos rebasado el límite del 10%. Si acaso llegáramos a excedernos del 10%, sería preferible que esto ocurriera al final del día y no desde el desayuno o el almuerzo. Lo que definitivamente no recomiendo es la completa sustitución del azúcar por sucralosa o stevia.

Esperando que la publicación les haya gustado me despido con la siguiente pregunta, ¿la falta de buenos hábitos en la alimentación justifica el consumo de edulcorantes con cierto grado de toxicidad?, ¿Qué opinan?

Referencias Bibliográficas

World Health Organization. (2015). Guideline: Sugars intake for adults and children. Ginebra. Recuperado de http://apps.who.int/iris/bitstream/10665/149782/1/9789241549028_eng.pdf?ua=1

Brandle, J. E., Starratt, A. N., & Gijzen, M. (1998). Stevia rebaudiana: its agricultural, biological, and chemical properties. Canadian journal of plant science, 78(4), 527-536. Recuperado de http://www.nrcresearchpress.com/doi/abs/10.4141/P97-114#.WBIZolUrLZ4

Jiménez, T., Cabrera, G., Álvarez, E., & Gómez, F. (2010). Evaluation of the content of stevioside and rebaudioside A in a population of Stevia rebaudiana Bertoni (kaâ heê) commercially cultivated. A preliminary study. Memorias del Instituto de Investigaciones en Ciencias de la Salud, 8(1), 47-53. Recuperado de http://scielo.iics.una.py/scielo.php?pid=S1812-95282010000100007&script=sci_arttext&tlng=en

JECFA. (1999). Sweetening agent: Stevioside. (No. 933). Recuperado de http://www.inchem.org/documents/jecfa/jecmono/v042je07.htm

FAO/WHO. (2008). Joint FAO/WHO Expert Committe on Food Additives. Sixty-ninth meeting. Summary and Conclusions (No. JECFA/69/SC). Roma, Italia.

Navarro, M., & Cameán, A. M. (2000). Aspectos Bromatológicos y Toxicológicos de los edulcorantes. Ediciones Díaz de Santos.

JECFA. (2005). Sucralose. Recuperado de http://www.inchem.org/documents/jecfa/jeceval/jec_2206.htm

Mishra, A., Ahmed, K., Froghi, S., & Dasgupta, P. (2015). Systematic review of the relationship between artificial sweetener consumption and cancer in humans: analysis of 599,741 participants. International journal of clinical practice, 69(12), 1418-1426. Recuperado de http://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1111/ijcp.12703/full

jueves, 29 de septiembre de 2016

Lo que LALA NO dice de su Leche Sin Hormonas

Imagen propiedad de LALA
Al recorrer el pasillo de leche y bebidas "tipo leche" en tetrapak, llama mucho la atención la presentación de leche LALA sin hormona STBr añadida. Desde que vi su nuevo empaque, me surgió la inquietud de ponerme en contacto con la empresa con la finalidad de hacerles algunas preguntas al respecto. Reflexioné un poco sobre este tema y entonces me pregunté lo siguiente:

1. ¿Por qué la hormona es suministrada a vacas?

Evidentemente para que produzcan una mayor cantidad de leche. Revisando algunas investigaciones científicas, el uso de la hormona somatotropina bovina recombinante (STBr) puede incrementar la producción de leche de un 10 hasta un 33% dependiendo no sólo de la cantidad de hormona suministrada, sino también de factores como la temperatura ambiente, el periodo de lactancia, el manejo general del rebaño, entre otros (Vargas, 2006).

2. ¿Qué efectos negativos tiene el uso de esta hormona?

Para empezar, debemos considerar que la hormona de crecimiento bovino la producen naturalmente las vacas (Kingsnorth, 1998). Sin embargo, mediante ingeniería genética se ha creado una copia de esta hormona para ser suministrada a estas mismas vacas. En este sentido, creo que todos coincidimos en que el suministro de esta hormona NO es natural y que por lo tanto puede crearle un estrés al animal.

Hasta el momento, se dice que la leche de vacas tratadas y no tratadas con hormona STBr prácticamente es igual en contenido de nutrientes. Sin embargo, desde los años 90's se propuso que la STBr estimulaba a su vez, la producción de otra hormona llamada LGF-1 Factor de crecimiento 1 tipo insulina. Esta hormona la producen naturalmente tanto vacas como humanos, pero en el caso de vacas suministradas con STBr, la LGF-1 aumenta considerablemente en la leche de vaca. Estudios reportaron que altos niveles de LGF-1 aumenta 4 veces más el riesgo de cáncer de próstata en varones y 7 veces más el riesgo de cáncer de mama en mujeres (Kingsnorth, 1998).

3. ¿Será que LALA nunca ha empleado la hormona STBr o simplemente abandonó esa práctica?

Para tal motivo contacté a grupo LALA y esta fue su respuesta: "Consideramos importante hacer del conocimiento de los consumidores que está práctica no se lleva a cabo en la producción de la leche LALA".

Sin embargo, si ustedes ingresan a su sitio web encontrarán que antes de 2010 la hormona STBr sí era suministrada a las vacas.

4. Si la hormona ya no es suministrada a vacas, ¿cómo hace grupo LALA para cubrir la demanda actual de leche?

El mismo día que escribí a grupo LALA, también les hice esta pregunta y hasta la fecha no he recibido respuesta. Debo decir que me defraudó un poco el hecho de que no me respondieran, considerando que les escribí 2 veces más con la misma pregunta. ¿De qué sirve un 01 800 o el apartado de "contáctanos" si sólo proporcionan respuestas "maquilladas" o "a medias". Debido a esto, decidí investigar algunos datos sobre la producción y el consumo de leche en nuestro país. Aquí les recopilo la información que encontré:

  • Las vacas producen leche después del parto. Su tiempo de lactancia es de 300 días aproximadamente y para que la producción de leche sea continua, la vaca debe quedar preñada en un periodo menor a 90 días después del parto. Este proceso se repite hasta que la vaca es destinada al matadero (GBC Group). 
  • Para los sistemas de producción de leche en granjas familiares, la SAGARPA recomienda dejar a los becerros 2 o 3 días con la vaca con la finalidad de proporcionarle anticuerpos. Posteriormente los becerros se separan de la madre y son alimentados con cierta cantidad de leche así como con sustitutos. Después de 40 días, el becerro sólo se alimenta de forrajes (Herrera, s.f.).
  • Grupo LALA SAB de CV liderea el mercado de productos lácteos seguido por Alpura (EUROMONITOR, 2016).
  • De 2011 a 2013, en México se vendieron más de 4,000 toneladas de leche por año, aunque el volumen de ventas ha ido disminuyendo. Lo anterior se debe al aumento de ventas en productos alternativos a la leche (EUROMONITOR, 206) como bebidas de soya, almendra, arroz, etc. 

Reflexión

Si consideramos que en México el consumo de leche ha disminuido en los últimos años, es congruente pensar que grupo LALA no tiene necesidad de suministrar la hormona STBr a sus vacas, ya que en realidad la demanda no ha aumentado. Sin embargo, puede ser que la empresa NO quiera hablar sobre sus prácticas en la crianza de ganado lechero debido a que algunos grupos pudieran catalogarlas como "maltrato animal" por el hecho de estar preñando un vaca constantemente hasta que ya no pueda dar crías y/o leche de calidad. 

Por otra parte, está el tema de la disposición de becerros. La SAGARPA recomienda la cría de becerras ya que éstas serán las próximas vacas lecheras. No obstante, la pregunta es si las grandes lecheras como Grupo LALA, ¿crían a los becerros o los destinan directamente al matadero? Puede ser que los litros de leche producidos por sus vacas sólo alcanzan para cubrir la demanda humana.

Creo que el análisis de este producto nos lleva a cuestionarnos como consumidores ¿qué tan alejados estamos del sector primario de alimentos?, ¿por qué depositamos nuestra confianza en empresas que no están dispuestas a darnos la información completa sobre los productos que nos venden?

Finalmente, sólo quiero destacar el hecho de que en la actualidad, muchas de las prácticas que se llevan a cabo en el sector primario están respaldadas por la demanda de los consumidores. Así es, en parte somos responsables de que las empresas utilicen diversos métodos, como en este caso el suministro de hormonas, para brindarnos un producto que estamos exigiendo a diario. Es por esto, que los invito a diversificar nuestra alimentación. El día de hoy podemos disfrutar de un vaso de leche sin Hormona STBr añadida, el día de mañana de un vaso de "leche" de coco, arroz, almendra... Tratemos en la medida de lo posible, ser consumidores más conscientes sobre la demanda de productos que nosotros mismos generamos.

Referencias Bibliográficas

Vargas, A., Osorio, C. A., Loaiza, J., Villa, N. A., & Ceballos, A. (2006). Efecto del uso de una somatotropina bovina recombinante (STbr) en vacas lecheras a pastoreo bajo condiciones tropicales. Archivos de medicina veterinaria, 38(1), 33-38.

Kingsnorth, P. (1998). Hormonas de crecimiento bovino'. The Ecologist.

Lala Te Cuida | Lala. Sin Hormonas Añadidas. Recuperado de: http://www.lala.com.mx/lalatecuidac.php,

Red de Genómica En Bovinos Para El Crecimiento Económico. La industria ganadera en México. Recuperado de: http://www.gbcbiotech.com/bovinos/bovinos.html,

Herrera, José. (s.f.). Sistema de Producción de Leche en Granjas Bovinas Familiares. Recuperado de: http://www.sagarpa.gob.mx/desarrolloRural/Documents/fichasaapt/Sistema%20de%20producci%C3%B3n%20de%20leche%20en%20granjas%20bovinas%20familiares.pdf

Euromonitor International - Analysis. Drinking Milk Products in Mexico. Recuperado de: http://www.portal.euromonitor.com/portal/analysis/tab